lunes, 3 de diciembre de 2012

36. Salto al vacío

Fría y azul resultó ser. Y húmeda. Y frágil.
Tendida al sol, aferrada a una vida inmóvil, su tiempo era de espera y de riesgo.

Promedió la mañana, creció la luz, vino el viento. 
Su azul era más cielo y el jardín una promesa agradable.
Tomó valor, si es que hay valor en la pureza, y se impulsó hacia la nada, para probar su suerte.

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